No eres sueño de almohada,
ni de sabanas de terciopelo…
eres sueño contenido,
estímulo que estalla y resplandece.
estímulo que estalla y resplandece.
Envuelto entre algodones,
transparente a la mirada,
reflejo en mis ojos,
protegido en debilidad.
protegido en debilidad.
No eres sueño inalcanzable…
ni rutilante historia estrellada,
vives entre mi aire...
y mi alma.
y mi alma.
Entras y sales de mi cuerpo,
te instalas en mi cabeza,
arrullas mis ilusiones,
provocas mis esperanzas.
No vives entre mis sabanas…
habitas más adentro,
en la realidad más tangible.
Eres mi mitad…
la plenitud de mi alma,
mi realidad, no mi sueño.
Reme Gras.
Derechos reservados.
Derechos reservados.
2 comentarios:
Lo dicho, mi querida Amiga del Alma.
La Verdad como el Amor comienza y está en el interior de uno mismo, y aunque este hermoso poema puede entenderse de mil formas y maneras, a mí me parece delicadamente bello y lleno de esencia espiritual.
¡Gracias!,
Mariajo
Muchas gracias, si te gusta para mi es más que suficiente... un abrazo.
Reme.
Publicar un comentario