Mi camino se volvió blando,
no inseguro…más bien acolchado.
y lo aprendido desaparece,
se evapora, como mis lágrimas.
Y nace agua en el desierto,
estalla el manantial seco,
crecen las espigas,
y el viento ronronea su canto más
bello.
Renacen sueños y esperanzas,
el color estalla en los valles
es el reencuentro con la vida,
la más armoniosa de las etapas.
Una cadena infinita,
que se renueva cada ciclo,
en un orquestado movimiento.
Desde
ese universo nimio,
pequeño e invisible,
que se expande cada día,
dentro de mi corazón.
Y revivo…
paseando entre nubes.
Reme Gras.
Derechos reservados.
6 comentarios:
Bellísimo poema, querida Reme, ese revivir y renacer dentro de tu propio corazón. Comparto tu paseo por las nubes con muchísimo gusto, querida amiga. Besos y muy feliz fin de semana :-))
Muchas gracias Mayte... un abrazo junto a mi gratitud.
Reme.
Hermoso poema Reme, morir, y renacer en el alba es el mejor de los regalos que nos da la madre Naturaleza, disfrutemos de ello mientras lo tengamos.
Un placer leerte siempre.
Que disfrutes de la tarde.
Besos Reme.
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Un abrazo.
Muchas gracias Carmen... un abrazo.
Reme.
Muy amable Montse... me pasare descuida.
Un abrazo.
Reme.
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